Tres mecanismos de resiliencia a los que puedes recurrir en épocas de estrés

El estrés se manifiesta de distintas formas y puede dificultar el pensamiento crítico, la gestión del tiempo y la capacidad de concentración. Si padeces cualquiera de estos síntomas, ten claro que no eres el único. Muchos de nosotros vivimos actualmente con un nivel agudo de estrés, debido en parte a los desafíos surgidos con la pandemia global.

¿Cuáles son las consecuencias del estrés en las funciones cognitivas? En palabras del neurocirujano Allan Hamilton: “Actualmente, contamos con un nivel de atención menor, y no nos concentramos. Nuestra memoria no funciona bien y, a menudo, nuestra función lingüística no es óptima”.

El neurocientífico formado en Harvard y autor de éxitos de ventas cuenta con más de una década de experiencia creando modelos de pandemias, y evaluando sus efectos emocionales y sociales. En diciembre de 2020, el Dr. Hamilton se unió a grupo de expertos para un evento de Haworth Connect en el que plantearon sus perspectivas sobre los avatares de 2020, con una visión encaminada a promover el éxito en 2021.

Para el Dr. Hamilton, mejorar la claridad mental es la clave primordial del éxito. Si te afecta el estrés, hay medidas que puedes tomar para calmar tu mente. Prueba a aplicar tres sencillos ajustes en tu día a día para mejorar la claridad mental: haz descansos, duerme más y reduce la multitarea.

1. Haz descansos
El primer paso para reducir el estrés es eliminar la presión, tanto la real como la percibida. Date el lujo de hacer más descansos y emplear más tiempo del normal para terminar las tareas asignadas. Permítete el lujo de repasar tu trabajo. Deja algo aparte y fija un tiempo para retomarlo más tarde. En épocas de estrés, tu memoria no es tan efectiva, así que es importante darle a tu cerebro tiempo para reorganizarse a fin de mejorar la calidad mental general y el bienestar. 

2. Duerme más
El sueño es un antídoto excelente para el estrés. No obstante, el estrés también puede mermar nuestra capacidad de conciliar el sueño y sentirnos descansados. Para mejorar los ciclos de sueño, plantéate buscar o crear mecanismos que te ayuden a dormir. Una canción relajante, el suave murmullo de un ventilador, bajar las persianas o una manta gruesa son solo algunos ejemplos. Para dormir bien por la noche, y reponer el cuerpo y la mente, es esencial que no te lleves el trabajo a la cama. Deja los ratos con el portátil para el despacho, el salón, la salita, la cocina o dondequiera que sientas que eres más productivo.

3. Reducir la multitarea
¿Sabías que tu cerebro solo es capaz de gestionar 100 bits por segundo? El cerebro tarda unos 120 segundos en recalibrarse para ejecutar una nueva tarea. Este procesamiento de información requiere un trabajo y puede hacer que nuestro cerebro se fatigue, lo que se suma al hecho de que, a menudo, pasamos de la pantalla del ordenador al teléfono, de los mensajes de texto al correo electrónico, además de apuntar alguna nota que otra con el bolígrafo. Nuestro empeño de hacerlo todo a la vez tiende a saturar nuestro cerebro. Lo mejor que podemos hacer en momentos o épocas de mucho estrés es centrarnos solamente en una sola cosa. De esta manera, te sentirás satisfecho de ir tachando cada tarea completada y de hacer una pausa para descansar la mente, algo sumamente necesario. Otras estrategias útiles son la conciencia plena, dedicar un corto espacio de tiempo a una actividad que te guste y la aceptación.